domingo, 29 de marzo de 2009

Curso sobre identificación de anfibios

Los días 20, 21 y 22 de marzo de este año fui a un curso sobre identificación de anfibios que organizaba la Asociación El Bosque Animado en el Parque Natural de la Sierra de Cardeña y Montoro (Córdoba), tierra de linces y lobos.

El paisaje tiene relieves suaves cubiertos por pinar de repoblación (pino piñonero), dehesas, encinar con sotobosque y algunas manchas de rebollo o melojo (Quercus pyrenaica). Atraviesa el parque el Río Yeguas y numerosos arroyos que hacen de afluentes.
En el curso dimos las clases teóricas en el centro de visitantes "Venta Nueva", en el km. 79 de la N-420. Junto al centro de visitantes hay varias lagunas donde es posible oír y observar anfibios.


La noche del sábado hicimos una salida nocturna acompañados por nuestros profesores y el director conservador del Parque, Jose Manuel Quero, para buscar y reconocer especies de anfibios. Visitamos la charca de Yegüerizo y después el arroyo de la Aldea del Cerezo. Así empezamos a aprender a distinguir los cantos de distintas especies de ranas y sapos.

Por supuesto recuerdo a todos que en España todas las especies de anfibios están protegidas por ley y que no es posible recolectarlas. Nosotros las observamos y las devolvimos a su medio. La organización de curso contaba con los premisos correspondientes. En las charcas y arroyos vimos numerosas especies de anfibios y reptiles aunque no tengo fotos de todas las que nos encontramos.

Rana común (Pelophylax perezi)

Ranita meridional (Hyla meridionalis)

Sapo corredor (Bufo calamita)

Sapo común (Bufo bufo)

Sapo de espuelas (Pelobates cultripes)



Sapillo pintojo ibérico (Discoglossus galganoi)




Macho (derecha) y hembra (izquierda) de tritón pigmeo (Triturus pygmaeus)


Culebra viperina (Natrix maura)


Galápago europeo (Emys orbicularis)

viernes, 27 de marzo de 2009

Orientación: ¡No te “pierdas” este artículo!

A continuación expondré aquí unas nociones básicas en cuanto al uso del mapa y la brújula en nuestras excursiones. Esto nos será de gran utilidad para identificar el camino y reconocer los accidentes geográficos a nuestro alrededor.

Con la práctica iremos mejorando poco a poco nuestro manejo de los mapas. Además veremos otros métodos de orientación sin brújula.

Mapas:
Un mapa es una representación plana del terreno y a una escala reducida. La escala del mapa indica la relación de proporción entre el terreno y su representación en el mapa.
La escala de los mapas se representa en forma de cociente o fracción, por ejemplo: 1/100000, 1/50000, 1/25000… Y significa lo siguiente:
Escala = Distancia en el mapa/ Distancia en la realidad
En un mapa 1/50000, 1 cm de longitud en el plano corresponden a 50000 cm en la realidad.


Los mapas con una escala que abarca una gran cantidad de terreno no son aconsejables para una excursión a pie. Este es el caso de los mapas de carreteras y provinciales de 1:500.000, 1:200.000, 1:100.000, ya que no se pueden apreciar los detalles del terreno. Los mapas de escala 1:25.000 son más apropiados para montaña y terreno accidentado al mostrar cotas de altura mas precisas y senderos secundarios.
Para representar el relieve en un mapa se usan curvas de nivel. Las curvas de nivel son las líneas que unen los puntos del terreno que tienen la misma altitud o cota. Las curvas de nivel en el mapa han de ser cerradas, no pueden cortarse ni bifurcarse.
Las cotas importantes se representan en el mapa mediante un punto o triángulo negro indicando su altura.
En todos los mapas hace falta representar los detalles del terreno, sean naturales o creados por el hombre, como un río, un lago, una carretera, etc. Por eso los mapas vienen acompañados por una leyenda. Es la leyenda están representados todos los símbolos que aparecen en el mapa con su significado.
Las carreteras se representarán en distintos colores según su jerarquía: rojo, naranja, verde, o amarillo. Los tramos dibujados en discontinuo significan carreteras en construcción.
Para los ríos o canales se usará una línea azul. Los nombres de estos aparecerán en el mismo color. Los lagos y presas aparecerán como masas de color azul también con su nombre en el mismo color.
En un mapa aparecerán también muchos nombres con distinto tamaño y grosor. El conjunto de nombres que aparecen en el mapa es la toponimia. El tamaño y grosor de las letras indican su jerarquía (las ciudades tendrán letras más grandes y gruesas que los pueblos o aldeas).


Accidentes del terreno:
Aquí pongo el significado de algunos términos de accidentes geográficos que nos podemos encontrar en la descripción de una ruta:
  • Acantilado: terreno que limita con el mar de forma escarpada.

  • Colina: Pequeña elevación del terreno con forma cónica y roma que no supera los 300 metros (véase “El hombre que subió a una colina pero bajó de una montaña”)Si las laderas de la colina son de pendiente fuerte, se le llama cerro.
  • Hoya: Depresión o hundimiento del terreno.

  • Línea de cumbres o cordal: Es la línea imaginaria que une los puntos de mayor elevación del terreno.

  • Puerto o collado: Depresión amplia entre dos montañas o elevaciones del terreno utilizada, normalmente, para pasar de una vertiente a otra. Lo explicaré de otra forma que me hizo comprenderlo al momento. Imaginaos los pechos de una mujer tumbada boca arriba… pues el collado es el canalillo que hay entre las dos “elevaciones”.

  • Vaguada: La parte más profunda de un valle, que marca el cauce natural de las aguas. Si la vaguada es muy profunda se llama barranco; si se encuentra entre dos paredes se llama garganta; y si la garganta es de mucha longitud se le llama desfiladero.

Cómo calcular distancias sobre el plano:
En un mapa para ver la diferencia de altitud entre dos puntos simplemente nos fijaremos en qué curva de nivel se encuentra cada uno. Sabiendo la altitud de los dos puntos, hallaremos el desnivel restando ambas altitudes.
Ahora vamos a conocer algunas definiciones de distancias:
La distancia real entre dos puntos es la que existe entre ellos teniendo en cuenta las irregularidades del terreno.
La distancia natural o geométrica es la que existe entre esos puntos si los uniéramos con una cuerda tensa, o sea, en línea recta descartando las irregularidades.
La distancia horizontal es la proyección sobre un plano horizontal de la distancia real. Esta es la que se representa en el mapa.



Para calcular distancia horizontal entre dos puntos en el plano mediremos con una regla la distancia que los separa, y después aplicamos la transformación según la escala del mapa. Si por ejemplo la escala de plano es 1/50000 y la distancia entre dos puntos es 10 cm hacemos una sencilla regla de tres:
1 cm en el plano → 50000 cm en el terreno
10 cm en el plano → x cm en el terreno
x = (10 x 50000)/1 = 500000 cm = 5000 m en el terreno
Calcular la distancia horizontal en el mapa en un buen método para saber aproximadamente qué distancia tendrá nuestro recorrido. Aunque hemos de saber que la distancia horizontal será menor que la distancia real.
Una aproximación mejor a la distancia que vamos a recorrer es ver la distancia natural. ¿Y cómo podríamos calcular la distancia natural de una ruta en un mapa? Pues aplicando el Teorema de Pitágoras: a2 = b2 + c2 (Siendo “a” la distancia natural). Para calcularla solamente deberemos conocer la distancia horizontal sobre el plano (que será “b” en la ecuación) y el desnivel que salvaremos (será c en la ecuación).



Otro cálculo que debemos saber es cómo calcular la pendiente del terreno. La pendiente es la tangente del ángulo que forma el terreno con la horizontal, es decir el cociente entre el desnivel y la distancia horizontal.
Por ejemplo, si el desnivel es 280 m y la distancia horizontal es 2000 m:
Pendiente = 280 /2000 = 0,14 = 14 %

La brújula:
Existen multitud de modelos de brújula. Básicamente una brújula es un instrumento formado por una aguja de acero imantada suspendida dentro de una carcasa y que siempre se orienta marcando el eje norte-sur
El limbo de la brújula es el círculo graduado sobre el que se sitúa la aguja. Hay brújulas con limbo fijo (la aguja es la que gira libremente) o con limbo móvil (la aguja está fija y el limbo es el que gira libremente).
Para elegir nuestra brújula evitaremos modelos que no tengan liquido estabilizador dentro de la carcasa, y los que contengan burbujas en el líquido (les quita precisión). No usaremos brújulas que no tengan base transparente porque se hace más difícil el uso con los mapas.



Tampoco usaremos las brújulas que vengan acopladas a cuchillos o navajas ya que son muy imprecisas por los golpes y el uso de los objetos a las que van pegadas.
Nos fijaremos que los indicadores de los grados y los puntos cardinales estén grabados y no solamente dibujados, pues con el uso se borran.
Los objetos metálicos y las conducciones eléctricas de alta intensidad cercanos a la brújula pueden alterar su funcionamiento. Los campos magnéticos pueden incluso en determinadas circunstancias invertir la polaridad.
Por eso a la hora de usar la brújula hay que tener atención de hacerlo unos cuantos metros separados de objetos como vehículos, alambradas, vallas metálicas, postes metálicos, conducciones de electricidad importantes, etc.
En la latitud a la que nos encontramos en Andalucía no tendremos en cuenta la declinación magnética que hace que no coincida totalmente el norte magnético con el norte geográfico. Así que no tendremos que hacer correcciones de declinación. Conforme nos desplazamos hacia los países del norte, la declinación magnética aumenta. La declinación también varía a lo largo del tiempo.
La intensidad vertical del campo magnético, llamada inclinación, tampoco es la misma en todos los puntos, lo que influye en la posición horizontal de la aguja. Si la inclinación es demasiado grande la aguja chocará con el limbo y no podrá girar libremente, dando lecturas erróneas. Existen brújulas con un sistema que corrige la inclinación y pueden ser usadas en cualquier latitud (hemisferio Norte o Sur). La inclinación magnética tampoco será un problema para las rutas propuestas en esta página.

Orientarse con la brújula:
Ahora veamos el uso práctico de una brújula de base transparente. Las instrucciones de una brújula son más fáciles de lo que parece en un principio y se pueden hacer las siguientes tareas:
- Orientación aproximada: "A mano libre", se sostiene la brújula a la altura de la cintura y se observa desde arriba el centrado de la aguja.
- Orientación del mapa:
a. Ajustar el ángulo de dirección N=0º.
b. Colocar la brújula en dirección norte a lo largo de la red de cuadrícula N-S sobre el mapa.
c. Girar el mapa con la brújula hasta que la punta N de la aguja quede entre las marcaciones del norte.



- Determinación de la dirección de marcha en el mapa:
Este es el método más usado para orientarse con la brújula ya que es rápido y eficaz. Consiste en averiguar primero el rumbo y después apuntar y avanzar tomando referencias en el terreno, pero para ello es preciso saber donde nos encontramos.

a. Colocar la brújula sobre el mapa con un canto lateral sobre la recta que une la posición actual A y el punto de destino B. La flecha direccional debe apuntar hacia el destino B.
b. Girar la cápsula de la brújula hasta que las líneas N-S de la cápsula estén ubicadas paralelamente a la red de cuadrícula N-S del mapa.
c. Levantar la brújula y apuntar, orientando la brújula hasta que la aguja que indica el N coincida con la marca de Norte; entonces en esta dirección seleccionar puntos destacados del terreno como referencia. Al ángulo formado por el Norte geográfico y la dirección de la marcha se le conoce como acimut o rumbo.



- Determinación de un punto visible en el terreno:

a. Apuntar con la brújula el punto a determinar y ajustar el ángulo de dirección girando la cápsula de la brújula (ubicar las marcaciones del Norte de la cápsula sobre el Norte de la aguja).

b. Marcar en el mapa la posición actual propia.

c. Colocar la brújula sobre el mapa, arrimar el canto anterior de la brújula al punto de la posición actual, girar la brújula alrededor del punto de la posición actual hasta que las líneas N-S de la cápsula estén paralelas a la red de cuadrícula N-S del mapa.

d. El punto a determinar se encuentra en la línea generada por el canto lateral de la brújula.


- Determinación de la posición actual propia:

a. Apuntar con la brújula un punto conocido en el terreno y ajustar el ángulo de dirección.
b. Colocar la brújula sobre el mapa con el canto lateral en la marca del punto conocido y girarla hasta que las líneas N-S de la cápsula estén paralelas a la red de cuadrícula N-S del mapa.

c. Trazar en el mapa una recta paralela al canto lateral de la brújula en dirección de la parte anterior de la brújula, pasando por el punto conocido utilizado.

d. Elegir y apuntar un segundo punto y proceder nuevamente según operaciones a-c.

e. El punto de intersección de las dos rectas indica la posición propia buscada (la posición se determina con mayor exactitud si el ángulo de las dos rectas se aproxima a 90º).




Alternativas de orientación:
Sistema de sombra proyectada:

Un método que funciona perfectamente en horas cercanas al mediodía (de un día soleado, lógicamente) y en cualquier latitud. Se coloca un palo vertical en un terreno llano. Se mira donde cae la sombra del palo y se marca su extremo con una piedra (punto "a"). Esperamos media hora y marcamos el nuevo extremo de la sombra con otra piedra punto"b"). Uniendo estos dos puntos se obtendrá la dirección este-oeste, siendo el oeste el punto "a".




Una variante más precisa de este método, pero que requiere más tiempo (si estamos acampando, por ejemplo), es marcar el extremo de una primera sombra que haga el palo por la mañana (que el sol no esté a menos de 20 º de su altura máxima). Ahora trazamos un semicírculo centrado en la base del bastón y con radio igual a la longitud de la sombra del punto A. Cuando se acerque el mediodía la sombra se acortará. Al atardecer la sombra empezará a crecer y cuando corte el semicírculo marcamos el punto B con otra piedra.
Si unimos los dos puntos obtendremos la dirección este-oeste, siendo el oeste la primera marca de la mañana (punto A).




Método “el bosque nos habla” (musgos y líquenes):
Otra forma de orientación es fijarse en la vegetación. La mayoría de plantas tienden a crecer hacia el sol (fototropismo), así que sus flores y follaje más abundante suele orientarse hacia el sur, aquí en el hemisferio norte. Los troncos de los árboles suelen presentar el musgo más verde y abundante hacia el norte así como más cantidad de líquenes.
Si encontramos un árbol cortado, podemos observar que los anillos de crecimiento están más juntos en la dirección norte.

Método del Reloj:
¿Sabías que puedes convertir tu reloj en una brújula? De esta forma podemos encontrar el norte aproximado. Este método funciona mejor a latitudes (Norte o Sur) mayores que 15 grados. El primer paso es tener el reloj funcionando y en hora. Ahora tendremos que conocer si estamos en latitud Norte o latitud Sur.
- En latitud Norte, apuntaremos la aguja horaria hacia el sol (ver dibujo de la izquierda) fijemos una línea imaginaria que pase en el punto medio de la aguja horaria y la marca de las doce en tu reloj. Esta línea indicará la dirección Norte-Sur, y el Sur estará en el ángulo agudo formado por las 12 y la aguja horaria.
- En latitud Sur, apuntamos las 12 de nuestro reloj al sol (ver dibujo de la derecha) fijemos una línea imaginaria que pase en el punto medio de la aguja horaria y la marca de las doce en tu reloj. La línea imaginaria indicara la dirección Norte-Sur, pero ahora el ángulo mas pequeño nos indicará el Norte.



No creo que nadie lo pregunte, pero por si acaso… ¡los relojes digitales no sirven!


Estimación de la hora solar:
Al estar en el campo es útil estimar aproximadamente cuanta luz del día nos queda. Esto se realiza utilizando nuestra mano para medir ángulos. Tomaremos la bóveda celeste como un semicírculo con 180 grados. Sabemos que vemos desplazarse al sol 15 grados cada hora. Ya que cuatro dedos de nuestra mano equivalen a 15 grados, sabremos cuantas horas de luz faltan para el ocaso.




Método de fases lunares:
Con la luna podemos orientarnos conociendo en qué periodo lunar nos encontramos. Cuando está en creciente, la cara iluminada señala el Oeste y cuando está en menguante, la cara iluminada apunta al Este.


Sistema de sombra proyectada con luna:
Es igual que el primer método donde usábamos un palo, pero usando en este caso la luz de la luna llena.

Orientación por las estrellas:
Las estrellas permanecen entre ellas en las mismas posiciones (nosotros no detectamos su lento movimiento) lo que no ayudará a orientarnos en noches despejadas. Podemos observar que las estrellas y constelaciones se mueven de este a oeste. Y además todas esas estrellas se moverán en torno a una que permanecerá fija en el cielo nocturno, la Estrella Polar (que forma parte de la Osa Menor).
Conociendo unas pocas constelaciones podemos encontrar el Norte y orientarnos fácilmente.



En esta imagen podéis ver algunos métodos para localizar la Estrella Polar. La estrella Polar nos indicará siempre el Norte. La magnitud de la estrella Polar es de 2,1 (los astrónomos dan un 1 de magnitud a las más brillantes y un 6 a las menos brillantes), por tanto no es la que más destaca en el cielo nocturno. Para encontrarla podemos tomar como referencia algunas constelaciones que vemos a su alrededor:
  • El Carro u Osa Mayor: es visible durante todo el año. Prolongando cuatro veces el segmento de las dos estrellas más externas de la base del “cazo”, encontraremos la Polar. Curiosamente una de sus estrella es doble (son en realidad dos estrellas), Alcor y Mizar.



  • Casiopea: tiene forma de W y se encuentra en la Vía Láctea. Si El Carro no se pudiese ver ocultado por las nubes o por el horizonte, podemos usar esta constelación para localizar aproximadamente la Polar, ya que su estrella central casi apunta hacia ella.


  •  Orión; el cazador se encuentra sobre el ecuador y es visible desde los dos hemisferios.
    Se puede buscar la Polar prolongando siete veces la distancia entre las dos estrellas marcadas por la línea amarilla de la siguiente imagen.




jueves, 26 de marzo de 2009

Consejos para hacer senderismo

En este artículo trataré de describir una serie de puntos básicos a tener en cuenta por cualquier aficionado al senderismo. Son cosas que quizás parezcan muy elementales, pero que nunca deberemos olvidar.

Una buena planificación antes de una salida es muy importante para que la excursión salga bien. Hay que pensar en la comida que se va a llevar, la cantidad de agua, el transporte hasta el punto de partida, el abrigo y el equipo necesario. También es muy importante adaptar la duración y distancia de la ruta al nivel físico de los participantes y tener muy claro la climatología que hará ese día y las horas de luz de que disponemos.


Nunca se ha de ir solo y es muy aconsejable que el grupo lleve teléfono móvil para casos de emergencia. Avisad siempre con antelación a algún amigo o familiar de la ruta que haréis y del tiempo estimado hasta la vuelta.
Hace falta un conocimiento previo de la zona que se va a recorrer consultando mapas o guías y que algún miembro del grupo lleve al menos mapa y brújula, sobre todo las primeras veces que se haga una nueva ruta. Si disponéis de GPS, también será un buen compañero si tenéis los mapas de la zona cargados y lo sabéis manejar bien.

Como sabéis, el clima en la montaña puede cambiar bruscamente por la llegada de un frente de bajas presiones. La bajada de la temperatura a últimas horas del día puede sorprendernos también si no llevamos suficiente abrigo. En caso de niebla nunca hay que desviarse del sendero y si la niebla es muy densa es mejor dar la vuelta y volver inmediatamente. Mejor intentarlo otro día que perderse.


Cuidaos de los problemas de hipotermia o insolación yendo bien protegido con abrigo, algún sombrero y protector solar. En caso de una día entero en la nieve es importante llevar gafas de sol con un buen factor de protección UV.

En rutas a través de cauces de ríos o arroyos hay que evitar salir después de fuertes lluvias para que no nos sorprenda una crecida.


Algunas normas a tener en cuenta
Actualmente los deportes de naturaleza como el senderismo están en auge. Mucha gente acude a visitar los espacios naturales protegido para contemplación, para aprender o por ocio. Es importante que entre todos colaboremos para conservar estos espacios en el futuro y para eso podemos seguir unas sencillas normas de uso:

  • Seguid las indicaciones que os encontréis por el camino para no perderse. Es muy útil llevar un mapa de la zona. No entréis con vehículos de motor en los caminos o zonas que no esté permitido. 
  • Respetemos la fauna y la flora del lugar. No recolectéis plantas y no causéis molestias a animales. Además, en los espacios protegidos por ley está prohibida la recolección de plantas, animales o sus restos (ver por ejemplo la Ley 8/2003, de 28 de octubre de la flora y fauna silvestres de Andalucía). Haced mejor fotos para llevaros un recuerdo. 
  • No arrojéis basuras. Los campos, los ríos y las montañas no son vertederos. Es muy fácil guardar los desperdicios y envases vacíos en una bolsa para luego echarlos a la vuelta en algún contenedor. Pensad que a la vuelta, después de haber comido y bebido, la mochila pesa menos, así que no cuesta trabajo.
  •  Por vuestra seguridad no hagáis nunca una ruta solos. Avisad siempre a algún familiar o amigo de la ruta que tenéis pensada hacer ese día. Y llevad siempre algún teléfono móvil con la batería completamente cargada.
  • No seáis muy ruidosos ni vayáis gritando por la montaña. No quiero decir que haya que permanecer mudos, por supuesto. Caminando con relativo silencio sin levantar la voz es muy probable disfrutar observando a la fauna del lugar sin espantarla.
  • Si el sendero atraviesa alguna propiedad privada o alguna cerca pedid permiso a los propietarios para pasar. Sed educados con quien os encontréis por el camino. Tras abrir por una verja o puerta para pasar, volved a dejarla cerrada. Así evitaremos que pueda salir el ganado. 
  • Si vais a hacer vivac (pernoctar al aire libre) por el camino, pedir previamente permiso a las autoridades competentes, indicando número de personas, lugar, fecha y material con el que pasaréis la noche. Los permisos se piden en la delegación de la Consejería de Medioambiente de vuestra provincia. 
  • Nunca hagáis fuego. Está prohibido en cualquier zona que no esté expresamente habilitada para ello. En época de alto riesgo de incendio estará prohibido en todo lugar. En Andalucía, la prohibición comprende desde el 1 de junio hasta el 15 de octubre.